¡Hola hola!💛 ¿Cómo os ha ido la semana? A mí desde luego que estos primeros días de no tener que ir a clase me han sentado genial.👌 ¡Sí señor, oficialmente estoy de vacaciones!🎉 Llega lo bueno y con tanto tiempo para hacer cosas, tengo un montón de planes y proyectos en mente. Tantos que no sé si dos meses van dar para tanto, jejejej...😂 Así que, para calentar motores y empezar a tachar ideas de mi lista, ayer hice una cheesecake vegana. La verdad es que, últimamente, he estado viendo a muchos instagramers hacer su propia versión de la tarta de queso vegana. Obviamente, todas ellas no tienen nada de queso, porque este alimento es de origen animal. Es por ello que, me picaba la curiosidad y quería probar el sabor y textura de esta alternativa.😉 Por lo que, mirando recetas de aquí a allá, haciendo un max-mix de ellas y mis nuevas aportaciones, hoy os voy a enseñar el resultado de mi cheesecake vegana. Esta tarta está hecha con ingrediente 100% naturales, saludables y sin azúcares refinados.👍 Resultó estar buenísima.😍😍 Eso sí, sabor a queso no tenía muchos, pero la textura sí que estaba muy lograda. Os animo a que la probéis porque, vegano o no, a todos nos gustan las tartas bien ricas y fresquitas.😋 Además, no se necesita encender el horno, ideal para no achicharrarse en casa con estos días de calor. 😂
Por lo que pude ver, existen infinitas opciones para hacer una reinterpretación de la tarta de queso utilizando únicamente productos de origen vegetal. Casi todas llevan anacardos, aunque hay excepciones. Lo que varían son ingredientes como el agar-agar, tofu, crema de queso vegana, los aromas para dar el sabor, la base o los toppings que se usen para decorarla.😉 La que os traigo hoy está hecha a base de anacardos, tofu, leche de coco, maicena… Esté último ingrediente permite que al calentar la mezcla en un cazo (tal y como veréis en la receta), la tarta quede compacta una vez enfriada. Sin necesidad de gelatinas ni horneado. ¡Ya veréis que fácil es hacerla!👌
Como último detalle, os digo que para decorar la tarta preparé un caramelo de anacardos súper sano que estaba brutal. 💘 Asimismo, corté un plátano (la crema en si no lleva plátano, aviso para los haters de la fruta 😂) porque me gusta decorar los pasteles con fruta, y sinceramente creo que es de la que más le pegaba a esa combinación de sabores. No obstante, vosotrxs podéis dejar volar vuestra imaginación y darle vuestro toKe: poner mermelada, algún sirope, chocolate, únicamente fruta o dejarla tal cual que está de 10.😋
CHEESECAKE VEGANO
INGREDIENTES:
PARA LA BASE:
- 100 g de frutos secos (Pueden ser almendras, nueces, cacahuetes... o como en mi caso, un mix de todos ellos).
- 30 g de dátiles
- 30 g de aceite de coco
PARA EL RELLENO:
- 400 g tofu sedoso (del blandito)
- 50 g sirope de agave (Podéis poner miel para opción no vegana).
- 200 g anacardos
- 1 lata leche de coco (400ml)
- 1 cucharada aceite de coco
- El zumo de 1 limón
- Una cucharadita de extracto o esencia de vainilla
- 2 cdas colmadas de maicena
- 2 cdas levadura nutricional
- 1 pizca de sal
PARA EL CARAMELO DE ANACARDOS:
- 100 g de anacardos tostados
PD: Los podéis comprar ya tostados (tened cuidado de que no lleven sal ni estén fritos) o tostarlos en casa en una sartén durante 8-10 min o en el horno a 180ºC entre 7 y 10 minutos.
- 80 g de dátiles
- 60-70 g de agua
ELABORACIÓN:
PARA LA BASE:
1. Trituramos todos los ingredientes de la base con una batidora o en un procesador de alimentos hasta conseguir una especie de tierra compacta.
⚠ Atención: no os paséis porque los frutos secos soltarán sus grasas y os quedará una crema.
2. Cubrimos el fondo de un molde desmoldable (20 cm en mi caso) con papel de horno o vegetal. En cuanto a las paredes, yo las cubrí con acetato para conseguir un acabado aún más pulido, pero es totalmente opcional.
3. Echamos la mezcla anterior sobre la base del molde y prensamos bien con las manos hasta que esté compacto. Reservamos en el frigorífico.
PARA EL RELLENO:
1. Cubrimos los anacardos con agua y los dejamos en remojo 5-6 horas. Deben de quedar algo más blanditos.
PD: Si queréis acelerar este proceso podéis cubrirlos con agua hirviendo y dejarlos 1 hora.
2. Pasado el tiempo, ponemos todos los ingredientes del relleno en un procesador o bol y los trituramos hasta conseguir una mezcla sin grumos y homogénea. (Añadidlo a anacardos sin el agua. Escurrid, también, el tofu ya que suele venir con liquido).
3. Pasamos la crema a una cacerola y la llevamos a ebullición. Después, bajamos el fuego y cocinamos 2 minutos (debe de burbujear muy lentamente). Veremos cómo se vuelve ligeramente más espesa.
TIP: Es importante no dejar de moverla con una cuchara mientras se calienta (como si se tratase de una bechamel). Si le ha salido algún grumito, podéis pasar la batidora y conseguir crema aún más fina.
4. La echamos en el molde que teníamos en la nevera y dejamos que se enfríe a temperatura ambiente durante 1 hora, aproximadamente. A continuación, guardamos en el frigorífico hasta que la parte de arriba se ponga firme y pueda soportar el caramelo.
PARA EL CARAMELO DE ANACARDOS:
1. Empezamos poniendo los dátiles deshuesados a remojo en agua caliente durante 10 minutos.
2. Mientras tanto, trituramos los anacardos hasta hacerlos obtener una pasta (tipo crema de cacahuete).
3. Añadimos los dátiles (escurridos), el agua y trituramos hasta conseguir una textura fina.
4. Repartimos el caramelo sobre la parte superior de la tarta y la guardamos en la nevera durante toda la noche o preferiblemente 1 día entero.
PD: Es súper importante dejar que cuaje bien para que se compacte.
5. Al día siguiente, desmoldamos con cuidado, le quitamos el papel de acetato y la ponemos en un plato o stand de presentación. Para decorarla, yo corté medio plátano en rodajas y lo puse alrededor del pastel, pero vosotxs lo podéis decorar a vuestra manera. Cortamos un trocito, servimos y… ¡A disfrutar! 💗
No os olvidéis de ponerlo bonito y sacarle una foto para instagram etiquetando #untoKedetarta #untoKedecheesecake 💜💜
|
Espero que os haya gustado.😉
¡¡Os mando un súper besooo!!💋💋💋
0 comentarios